Los operadores del sector hotelero aseguran que el comienzo de la temporada es "moderado". Pero coinciden en que la llegada de turistas crecerá en los próximos días. El alquiler de casas y departamento llega al 80% y también se espera una mejora.
Ocupación del 70%, aumento paulatino en la llegada de turistas, perspectivas de mejora y la adversidad de un clima cambiante, son algunas de las conclusiones del inicio del año en materia turística en Mar del Plata.
Los operadores del sector coinciden en que la ciudad vive un moderado comienzo de temporada y las expectativas son que haya un repunte en los próximos días.
Tras la celebración del Año Nuevo, durante la semana se mantuvo el arribo de turistas tendencia que continuó el fin de semana, aunque no en los niveles acostumbrados. Un dato a tener en cuenta es que el pronóstico climático (al alcance en cualquier celular) anunciaba lluvia para los tres días, lo que pudo haber frenado muchos viajes de los que se definen a último momento.
Al igual que la temporada pasada, la gran cantidad de jóvenes es una de las marcas distintivas del verano.
Con niveles de ocupación que oscilan entre el 65% y el 70%, la hotelería atraviesa un inicio de temporada “moderado” con la perspectiva de que a partir de la próxima semana crezca la afluencia con la llegada de grupos de turismo previstas a partir de mañana.
Los análisis varían según las condiciones del alojamiento. En aquellos que tienen 4 o 5 estrellas, los niveles de ocupación son buenos si se tiene en cuenta el contexto general. Además, muchos de ellos contaban con una preventa concretada antes del verano.
En cambio, en aquellos hospedajes más económicos (dos estrellas) el panorama es más complicado. Uno de los motivos es que, a diferencia de otros años, se redujo mucho la llegada de contingentes vendidos por agencias de turismo que siempre fueron un motor.
“Ese sector está complicado y va a tener una temporada difícil. Para el resto, con que termine en siete puntos, será positivo”, definió un referente de la actividad.
Los precios, como siempre, varían. En un hotel de dos estrellas, la habitación doble está alrededor de $30.000 por noche mientras que en uno de cuatro estrellas, el valor parte de los $80.000, en promedio. Por supuesto, siempre hay variaciones teniendo en cuenta las características, los servicios del lugar y la ubicación.
Una incógnita que flota en el sector es si los valores se podrán mantener en caso de que no levante la demanda.
En ese sentido, varios hoteleros coincidieron en que “no aumentar ya sería como bajarlos porque los precios suben todo el tiempo”.
Departamentos
En el alquiler de plazas extrahoteleras, el movimiento viene de menor a mayor. Según referentes del sector, la ocupación ronda el 80% y las expectativas son que las cifras repunten.
“Arrancó tranquilo enero y va de menor a mayor. Todos los días entra algo de gente y esperemos que la segunda quincena esté a full”, definió Oscar Gonnet, titular de una inmobiliaria de la zona del centro.
Los precios de los departamentos, en promedio, son de $25.000 o $30.000 por día para un monoambiente (3 personas), y de $45.000 o $50.000 para un dos ambientes con cochera.
En tanto, la gran mayoría de los alquileres son por cinco días o una semana. Las ocupaciones por quincena están en vías de extinción.
En la gastronomía, el inicio de la temporada presenta disparidad. Los restaurantes más exclusivos (que han proliferado en los últimos años en la ciudad) mantienen un alto nivel de actividad todos los días. En tanto, en muchos de los locales de la amplia gama que ofrece Mar del Plata, el movimiento es moderado.
En el Centro Comercial del Puerto, un clásico, se mantiene la afluencia de comensales, aunque no en los niveles de años anteriores. “En comparación con el año pasado, estamos un 25% abajo en cantidad de público. Pero no nos quejamos y esperamos que mejore”, sintetizó el encargado de uno de los locales más tradicionales.